En esta mañana de camino hacemos juntos nuestra oración. Te sugiero que en un momento de silencio escuchando el murmullo del bus, con los ojos cerrados o viendo pasar las cosas:

• Des gracias a Dios que te ha puesto en CAMINO
• Le ofrezcas tu caminar de estos días...
• Repases con Él, lo que esperas encontrar...

Jesús dice: El reino de los cielos puede compararse a un tesoro escondido en un campo. El que lo encuentra, lo primero que hace es esconderlo de nuevo; luego, lleno de alegría, va a vender todo lo que tiene y compra ese campo.

Mt 13, 44-46

Rezamos juntos diciendo: Señor, ENSEÑANOS TUS CAMINOS:

• Enséñanos la atención a las cosas pequeñas, pero importantes. R/
• Danos ojos que sepan ver y admirar. R/
• Ojos atentos a tu voz; presente en cada rincón. R/
• Danos, sobre todo, un corazón que sepa amar a los compañeros de camino y a las gentes que encontremos. R/
• Danos un Espíritu dispuesto a aprender y a entregarse como un día lo hicieron Don Bosco y María Mazzarello. R/
• Ayúdanos para que los deseos, esperanzas e ilusiones que hemos puesto en este viaje, se hagan realidad. R/