Oración de la Noche
7 Agosto
INVOCACIÓN INICIAL
Ven a mí, Espíritu Santo,
Espíritu de sabiduría:
dame mirada y oído interior
para que no me apegue a las cosas materiales,
sino que busque siempre las realidades del Espíritu.
Ven a mí, Espíritu Santo,
Espíritu de amor:
haz que mi corazón
siempre sea capaz de más caridad.
Ven a mí, Espíritu Santo,
Espíritu de verdad:
concédeme llegar al conocimiento de la verdad
en toda su plenitud.
Ven a mí, Espíritu Santo,
agua viva que lanza a la vida eterna:
concédeme la gracia de llegar
a contemplar el rostro del Padre
en la vida y en la alegría sin fin.
Amén
LECTURA
Después salió de la región de Tiro, pasó de nuevo por Sidón y se dirigió al lago de Galilea atravesando la región de la Decápolis. Le llevaron un hombre sordo y tartamudo y le suplicaban que impusiera las manos sobre él. Lo tomó, lo apartó de la gente y, a solas, le metió los dedos en los oídos; después le tocó la lengua con saliva; levantó la vista al cielo, suspiró y le dijo: —Effatá, que significa ábrete. [Al punto] se le abrieron los oídos, se le soltó el impedimento de la lengua y hablaba normalmente. Les mandó que no lo dijeran a nadie; pero, cuanto más insistía, más lo pregonaban. Llenos de asombro comentaban: —Todo lo ha hecho bien, hace oír a los sordos y hablar a los mudos.Mc 7, 31-37
ORACIÓNadb
Dame AUDACIA.
En este mundo escéptico y autosuficiente
tengo vergüenza y miedo.
Dame ESPERANZA.
En esta sociedad recelosa y cerrada
yo también tengo poca confianza en las personas.
Dame AMOR.
En esta tierra insolidaria y fría
yo también siento poco amor.
Dame CONSTANCIA.
En este ambiente cómodo y superficial
yo también me canso fácilmente.
Conviérteme primero a mí
para que yo pueda anunciar a otros la Buena Noticia.
Gracias Jesús.