Tiempo Interior y Grupo

Tiempo Interior
Grupo
1 Agosto

Ya hemos llegado. Aquí estamos Señor, nos has traído a esta tierra santa salesiana. Hemos llegado a estos campos donde Juanito Bosco jugaba, trabajaba, hacía de saltimbanqui; a esta casa donde tuvo el sueño de los nueve años, soñó su misión; a esta casa de Mamá Margarita, madre de familia, educadora y catequista de Don Bosco; a estas colinas donde en otoño traía Don Bosco a sus chicos desde Turín.

En el "Tiempo Interior" de este segundo día podemos preguntarnos:

  • ¿Dónde estoy y a qué he venido?
  • ¿Por qué me has traído aquí Señor?
  • ¿Qué me quiere decir el Señor?

¡Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad! Esa es la clave de la vida cristiana. Así le dijo María al ángel: "Aquí tienes a la esclava del Señor". Decir "hágase…", es el secreto de la vida cristiana.

Cuéntale al Señor, en esta tierra de Don Bosco, tus preocupaciones actuales, pero no te olvides de contarle tus grandes deseos.

Reza de esta manera repitiendo varias veces en silencio: ¡Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad!

Quizá te ayude recitar, en tu corazón, la siguiente oración:

Señor, tú me sondeas y me conoces;
me conoces cuando me siento o me levanto,
de lejos penetras mis pensamientos;
distingues mi camino y mi descanso,
todas mis sendas te son familiares.

No ha llegado la palabra a mi lengua,
y ya, Señor, te la sabes toda.
Me estrechas detrás y delante,
me cubres con tu palma.
Tanto saber me sobrepasa,
es sublime, y no lo abarco.

Tú has creado mis entrañas,
me has tejido en el seno materno.
Te doy gracias,
porque me has escogido portentosamente,
porque son admirables tus obras;
conocías hasta el fondo de mi alma,
no desconocías mis huesos.